Síntomas
Dificultades del habla (tartamudeo, pérdida de palabras)
Episodios disociativos/ataques
Dificultades para regular la temperatura
Dolor
Náuseas y sensibilidad alimentaria
Me llamo María, tengo 29 años y me han diagnosticado un trastorno funcional multisistémico. Empecé a tener síntomas funcionales de niña, y a medida que crecía más y más síntomas se colaron poco a poco en mi vida.
Cómo empezaron los síntomas
Siempre he tenido problemas para conciliar el sueño y para mantenerme caliente desde que era muy pequeña. El dolor en las piernas se atribuía a los dolores de crecimiento, pero la frecuencia del dolor aumentó cuando me hice mayor y se extendió por todo el cuerpo. Más tarde sufrí una conmoción cerebral grave, a la que se achacaron todos mis dolores de cabeza.
Al entrar en la pubertad, mis defensas inmunitarias ya no funcionaban muy bien y sufría infecciones víricas constantemente. También luché contra el estrés durante mi época universitaria y el agotamiento, la confusión cerebral, los problemas del habla y cualquier otro síntoma extraño se achacaban a ello.
Problemas de habla
Uno de los síntomas extraños que he tenido es un trastorno funcional del habla. Normalmente hablo con fluidez en danés e inglés. Pero a veces empiezo a mascullar, a tartamudear, a confundir las palabras, a tener que pensar durante más tiempo antes de decir algo. Cuando estaba en mi peor momento, solía decir frases en las que todas las palabras eran correctas, pero el orden podía ser completamente erróneo. Las dos lenguas se intercambiaban libremente y de mi boca salían verdaderos galimatías. También suelo tartamudear cuando estoy muy estresada. Era muy perjudicial para mi autoestima, hasta que empecé a darme cuenta de que no era porque fuera estúpida, sino debido a una sobrecarga cerebral.
Sobrecarga
La explicación habitual es que las personas con trastornos funcionales suelen tener una vulnerabilidad subyacente debida a la genética o a la educación. Puede producirse un acontecimiento desencadenante que te lleve al límite y empeore drásticamente tu nivel de funcionalidad, o bien puedes experimentar un empeoramiento lento de los síntomas. Habrán también factores que pueden perpetuar los síntomas, de modo que uno no se recupera ni mejora como lo haría normalmente. Se trata de un sistema sobrecargado que no puede volver a arreglarse por sí solo.
Pero, ¿qué significa que un sistema esté sobrecargado? El cuerpo se autorregula de muchas formas distintas. Por lo general, el organismo recupera el equilibrio, pero si se le ha llevado al extremo durante demasiado tiempo, puede perder la capacidad de autorregularse.
En mi caso, fue una combinación de deterioro lento y, finalmente, un acontecimiento desencadenante en forma de infección respiratoria grave, que se produjo en un momento muy estresante de mi vida. Esto hizo que todos los síntomas, por lo demás molestos, se recrudecieran hasta tal punto que mi nivel de funcionalidad descendió de forma drástica.
Tratamiento y recuperación
Han pasado 2 años desde aquello y he mejorado mucho desde entonces. He pasado por varios médicos y he recibido tratamiento de rehabilitación en el Centro de Trastornos Complejos de Frederiksberg.
La regla básica que me enseñaron para la rehabilitación de trastornos funcionales es que debes poder hacer lo mismo todos los días sin que empeoren los síntomas durante 7-14 días. Después de esto se puede seguir aumentando, pero no más del 20%, y si se produce un empeoramiento de los síntomas hay que dar un paso atrás.
Según mi propia experiencia, esta norma funciona bien para mí, pero no el 20%. Hay tanta diferencia entre mis días buenos y malos que limitarme a lo que puedo hacer en los días malos no me funciona. En lugar de eso, entreno más los días buenos y me aseguro de prestar mucha atención para no sobrepasar el límite.
Para mí, reducir el ritmo cuando empecé la rehabilitación supuso una gran diferencia. Ha sido muy positivo para mí fijarme en lo que me rodea y dar paseos recolectando frutos de la naturaleza (bayas, frutas, setas, etc.) para alejar el cerebro de los pensamientos complicados y volver a algo que se adapte al ser humano primitivo.
Ensayo y error
Me resultó increíblemente difícil ordenar todos los consejos y los diferentes tipos de tratamiento que me ofrecieron, y gasté una enorme cantidad de energía teniendo que probar gran parte de ellos en mi propio cuerpo. Por eso he recopilado toda la información que he podido de todas mis visitas al médico, las investigaciones que he leído y las experiencias que he tenido. Si hay siquiera una persona ahí fuera que pueda utilizar algo de lo que he escrito para que sus síntomas mejoren, entonces ha merecido la pena.